Sábado 10 de diciembre
En un vuelo de Egypt Air nos trasladamos de Estambul a El Cairo. El vuelo fue normal y la comida bastante buena, muchos controles de seguridad que hacen las cosas más seguras pero mucho más tediosas. Llegada a el Cairo ya de noche. Nuestro contacto muy diligente nos esperaba en el aeropuerto y rápidamente nos pasó por migración y aduana. El traslado al hotel fue lento a causa del intenso tráfico en la ciudad. Apenas llegamos y ya se asomaba un caos vial que en nada envidia al de ciudad de México. La primera dificultad, sorpresa! Nos cambiaron de hotel por razones no explicadas y de la cual solo nos enteramos por teléfono, el representante de la agencia de viajes ni la cara dio. Prometió ponernos en un hotel de la misma categoría del Sheraton y de momento no había mas remedio que aceptar. En el trayecto del aeropuerto también conocimos a un par de chicas de Cuautitlan Izcalli que llegaban a El Cairo vía París (por supuesto desde México). Las chicas estaban agotadas! También hicimos "clic" con ellas, así que todo iba bien. Como ya era tarde para seguir la fiesta decidimos que lo mejor era descansar en el hotel propuesto, desde luego nada de dormir bien. Sherezada (de aquí en adelante ya no es Sherezada, es Nefertiti) tenia las "gomitas" de los pies muy da?adas y no se quería dormir. Un breve masaje de reflexología y a descansar.
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